Los hoteles, en líneas generales, están aguantando el tipo con los ERTE y los préstamos ICO pero hay algunos que tampoco pueden mantenerse ahí mucho más y se van a ver obligados a recurrir a grandes descuentos en el precio de venta, sobre todo, según ha detallado Inmaculada Ranera, directora general de Christie & Co para España y Portugal, “los que tienen una tesorería apretada o están financieramente mal, porque los bancos les están empujando a vender. Las entidades financieras sólo están apoyando a sus mejores clientes, que están refinanciando con ellos en lugar de con los ICO”. Sin embargo el mercado “de momento no está moviéndose mucho porque los inversores están esperando a que lleguen mejores tiempos con mayores descuentos. El mundo será de los valientes que se atrevan con ofertas con menos descuentos cuando comience la recuperación”.
Inmaculada Ranera prevé en este sentido “una recuperación con efecto descorche botella de cava porque hay mucha liquidez en el mercado y se producirá una reactivación muy rápida, aunque dependerá de lo afectada que esté la economía”.
Así, “el segundo semestre será muy activo en transacciones, cuando haya unas expectativas más claras de recuperación, porque los propietarios y gestores aguantan con sus hoteles cerrados, aunque los que los mantienen abiertos se benefician de cierto nivel de ocupación porque existe un ligero movimiento de negocio a pesar de las restricciones, pero no lo suficientemente atractivo”.
Inmaculada Ranera vaticina que la recuperación del sector tendrá un “efecto descorche de botella de cava” en cuanto se garantice la seguridad del viaje.
Los activos de segundo y tercer orden, como ha explicado Ranera, “serán los primeros en salir al mercado, en los dos primeros trimestres, pero muy lentamente porque sus propietarios no están desesperados por vender, sino que están en una posición de esperar y ver”.
Los situados en ubicaciones que no sean prime, según ha añadido, “tendrán que recurrir a grandes descuentos, de hasta el 40% o el 50%, que les permitan cubrir deuda y poco más, empujados a vender por los bancos. Aunque también hay que tener en cuenta que las ubicaciones terciarias atraen a una demanda eminentemente nacional, que previsiblemente se recupere antes que la internacional, pese a que todo dependerá del ritmo de vacunación en los distintos mercados”.
A diferencia de estos activos, “los inversores sí creen en las transacciones de establecimientos de lujo en ubicaciones seguras de destinos consolidados porque generan confianza. Prueba de ello son dos de las operaciones cerradas en el último trimestre de 2020: el Hotel Formentor (Barceló vende el mítico Hotel Formentor por 165 millones de euros) y el Nobu Barcelona (Venden el Nobu Hotel Barcelona a la gestora de fondos ASG por 80 millones de euros)”.
Renegociaciones de rentas
Lo cierto es que a los activos en peor situación financiera tampoco les quedan muchas opciones para evitar la venta ya que, como ha reconocido la directora de Christie & Co para España y Portugal, “ante el alargamiento de la situación y la falta de ayudas del Gobierno para las rentas, la renegociación ya ha dado de sí todo lo que podía y ahora mismo si no se ha alcanzado un acuerdo ya están en fase de arbitraje o de litigio. Y es que al ampliarse los ERTE hasta mayo habrá muchos hoteles que no abran antes. Y la financiación alternativa está a doble dígito, así que tampoco es una opción”.